Sucursal española de The Bank of New York Mellon, desde 1981 en Madrid. Esta entidad financiera es la mayor gestora multi-boutique del mundo. Gestiona clientes globales y fondos de inversión.
Trabajos
Creación de guion y producción del evento
Seguimiento y adecuación de clientes VIP
Contratación y coordinación de actores y animación musical
Selección y seguimiento de proveedores
Diseño de merchandising exclusivo
Localizaciones y catering tematizado
El cliente y su posicionamiento internacional
La sucursal española de The Bank of New York Mellon, establecida en Madrid desde 1981, representa la presencia de una de las entidades financieras más prestigiosas y con mayor alcance en el mundo. Reconocida como la mayor gestora multi-boutique global, la institución se caracteriza por su capacidad para ofrecer a sus clientes una combinación única de experiencia, solidez y diversidad en la gestión de activos. Su propuesta se dirige tanto a clientes institucionales como a fondos de inversión internacionales, con una estrategia que integra innovación financiera, asesoramiento personalizado y un compromiso permanente con la excelencia. En España, la sucursal actúa como un puente que conecta al mercado local con una red financiera global, aportando soluciones que responden a las exigencias de un entorno competitivo y altamente regulado. Su reputación de solvencia y liderazgo convierte cada una de sus iniciativas en una oportunidad para reforzar la confianza de clientes VIP y socios estratégicos.
Diseño del evento y producción integral
Para esta entidad, se llevó a cabo la creación de un guion exclusivo y la producción completa de un evento corporativo destinado a fortalecer relaciones con clientes estratégicos y socios de alto nivel. El desarrollo del guion permitió estructurar una narrativa coherente con los valores de la marca, asegurando que cada momento del evento transmitiera profesionalidad, cercanía y diferenciación. La producción incluyó desde la planificación de la agenda hasta la puesta en escena, cuidando cada detalle para lograr una experiencia inmersiva y memorable. La finalidad era no solo ofrecer un encuentro social, sino también consolidar vínculos de confianza, generar un ambiente propicio para el networking y reforzar el posicionamiento de The Bank of New York Mellon como referente en el sector financiero. La gestión de clientes VIP fue un eje central, garantizando un trato personalizado y adaptado a las expectativas de un público exigente que valora tanto la exclusividad como la atención al detalle.
Coordinación artística, proveedores y animación temática
Otro de los elementos clave fue la contratación y coordinación de actores y animación musical, diseñados para aportar un valor añadido a la experiencia y diferenciar el evento de los formatos tradicionales. La selección de artistas y propuestas musicales se realizó en línea con la identidad de la marca, transmitiendo sofisticación sin perder dinamismo, y asegurando que la ambientación acompañara cada fase del encuentro. A su vez, se gestionó la selección y seguimiento de proveedores, con el objetivo de garantizar la máxima calidad en todos los aspectos logísticos: desde la tecnología audiovisual hasta la decoración, la seguridad y la atención al cliente. Esta coordinación integral permitió crear un entorno fluido y sin contratiempos, en el que cada elemento trabajaba de manera armónica para potenciar el mensaje global del evento. La animación se concibió como un recurso estratégico para sorprender, emocionar y reforzar la percepción de exclusividad en los asistentes.
Merchandising, localización y catering temático
Para completar la experiencia, se diseñó un merchandising exclusivo, concebido como una extensión de la marca y un recuerdo tangible para los asistentes. Estos elementos, personalizados y de alta calidad, se seleccionaron cuidadosamente para reforzar los valores de distinción y prestigio que caracterizan a la entidad. Además, se realizó un exhaustivo trabajo en la selección de localizaciones idóneas, capaces de transmitir la imagen de solidez y modernidad que la firma proyecta a nivel internacional. El espacio elegido, junto con una propuesta de catering tematizado, ofreció un ambiente refinado y coherente con la narrativa del evento, donde cada detalle —desde la gastronomía hasta la ambientación— se alineó con la identidad corporativa. Gracias a esta combinación de creatividad, logística impecable y atención personalizada, el evento logró consolidarse como una experiencia inolvidable que no solo cumplió con las expectativas, sino que también reforzó la posición de The Bank of New York Mellon como una institución de referencia en la gestión de relaciones estratégicas de alto nivel.
